sábado, 25 de febrero de 2017

Mariquitas

Federico:
Me hubiese gustado morir entre manos más amenas.
Escuchando sevillanas o un verso de Rafael Alberti.
Cantando por bulerías o extasiado ante el dolor
de ver el color de Goya fusilándome a mi suerte.
Me hubiese gustado cerrar los ojos que hay en mi mente
con imágenes de amigos y con sonidos de fuentes,
que los moros me tejieran y que ya las tengo ausentes.
No podría dar yo más, pues estoy por dar mi muerte.
Mas la daría otra vez para enterrar yo a mi madre
y evitarle soportar el enterrar a su vientre.
No pensé morir así, tan desprolijo y sin gente.
Tan solitario en mi adiós estando en mentes presente.
¡Qué dolor le ha de causar a mis amigos
el ignorar de qué forma Federico, cayó inerte!
¿Cómo murió? ¿Pasó frío?
¿Dañaron sus manos blancas
o lo mataron dormido?
¿Lo violaron? ¿O murió como un torero
de esos, que él amó tanto
clavado por banderillas
con un estoque en su frente?
¡Que risa causan preguntas
que nadie ha de contestarse!
Si te preguntan, asesino tú calla.
No digas que me has matado.
Guarda el secreto en el alma
y el sitio donde lo has hecho
se pierda con su rocío.
Ya sé que no has de llorarme,
pero quién sabe, tal vez,
un día tu has de cumplir tu deseo… y leerme,
y podrás decirte a ti,
con un orgullo indecente:
“¡Hijo puta! A este tío lo maté
y no me nombra en su muerte”.
Y si por casualidad un día por aquí pasas.
Yo no te pido... ¡detente!
Simplemente mira allí donde estaré, enterrado indiferente,
y piensa que alguna vez tu correrás esa suerte.


Asesino:
- Es tarde y ya tengo frío.

Federico:
- Yo también. ¿será esto frío
o la ilusión de perderse?

Asesino:
- No te entiendo y son palabras
que me suenan maricuelas.
Dicen mis generales, y dice Queipo de Llano,
que eres marica,
y yo acato lo dicho por generales
y sobre todo, lo dicho por Queipo de Llano.
Palabras de un marica, que no se si son palabras.
En poco rato tendrá
España un maricón menos.
¿quieres lo ojos tapados?

Federico:
- Prefiero estar presente.

Asesino:
- Para que veas que soy un falangista decente,
ante este pelotón, del cual soldado soy yo
además de capitán, te doy a ti la ocasión
de hablar antes que llegue tu muerte.

Federico:
- ¿Me la das?

Asesino:
- Hazte con ella.

Federico:
- ¿Serías tal vez capaz
de guardar lo que yo diga en tu mente?

Asesino:
- Pierdes tiempo.
Va a aclarar, y a las dos tengo un almuerzo con gente que es muy decente.(Pausa) ¡Habla o te perforo de adentro! ¡Habla marica! Marica… ¡habla!

Federico:
(pausa. Observa)
Batallón de mariquillas de soldados que han venido
a mariquillearme con cien maricas plomizos
de pólvoras los maricas, y de maricas sus tiros.
Maricas que han mancillado
las falanges de Alejandro
usándolas como símbolo
sin saber que era un marica.
Y matan como maricas
al amor por pervertido,
y ciegan los ojos niños
y asá no verán maricas.
Maricas que me marican
por mariquear fantasías
que tildan de mariconas
por no encontrarles sentido.
Pelotones mariquitas
que destrozan... ¡maricones!
El corazón de este hombre
con dignidad de marica.
¡Tiren al centro marica
que dio a luz obras maricas!
Y traten de que al hacerlo
me olvide de un mundo marica.
Acribillen mis genitales
que a maricas endulzaron
y al hacerlo que me exploten
como frutillas... Maricas.
Que mi sangre reproduzca
en este suelo marica
flores de colores nuevos
que las verán mis maricas.
Marica quien me ha aplaudido
marica quien me ha leído
marica quien ha luchado
contra las hordas maricas
que bárbaramente rompen
la belleza de un marica.
Marica el Dante y su mundo
y Calderón... Un marica
que escribió que “todo es sueño”
y un sueño es acto marica.
Maricas los enfermeros
por sanar lepras maricas.
Galileo, el más marica,
por pretender ver redondo
un mundo cuadrangulado
por cuadrangulos maricas.
Marica el medico a palos
y marica su escribano,
¡Marica penicilina
que solo curas maricas!
Marica Don Juan tenorio
por amar él lo prohibido.
Y Beethoven ¡gran marica!
Que junto a Manuel de Falla
se atrevieran a dar sones
que por serlo son maricas.
Marica el crucificado
por redimir mariquitas.
Marica, madre, ¡marica!
Por haberme tu parido.
Marica también mi padre
por tener semen marica
y maricas mis ancestros
por engendrarnos maricas.
Y así... Sumando maricas...
Veremos que en cada tumba
de humanidades maricas
solo yacen esqueletos.
Esqueletos de maricas.
Se escucha un tiro
Apagón